15 Febrero de 2010
Lourdes Fernández: el mayor peso de ARCOmadrid lo tiene el coleccionista privado español
Lourdes Fernández, directora de ARCOmadrid ArteInformado (AI): ¿Considera superada la crisis que, en las últimas semanas, ha sufrido ARCOmadrid por el enfrentamiento entre galeristas españoles y la dirección ferial?
Lourdes Fernández (LF): Sí se ha superado, y estoy muy satisfecha por ello. Lo importante en estos momentos es la voluntad de compromiso que ambas partes hemos expresado públicamente por avanzar conjuntamente en el desarrollo de la Feria y en la construcción de su futuro. Creo que la solidez y la credibilidad de ARCOmadrid, ganada a lo largo de sus 29 años, va más allá de cualquier circunstancia, y eso es lo que realmente se ha valorado. Ahora debemos dejarle todo el protagonismo a la feria y unir esfuerzos por contribuir entre todos a que continúe cumpliendo su función como plataforma imprescindible para el mercado del arte contemporáneo.
AI: Si, como se asegura y, de vez en cuando, también se confirma, las instituciones públicas, verdadero sostén de la feria durante los últimos años, reducen al máximo sus compras en la feria, ¿considera que deberían revisarse cuestiones como la exigencia de contratar un determinado número de metros cuadrados por stand, el programa de coleccionistas privados desarrollado por la feria o, incluso, el mismo abultado número de expositores habitual en ARCOmadrid? ¿En qué dirección ha de transitar ARCOmadrid en los próximos años?
LF: Es verdad que el apoyo institucional ha sido muy importante para la feria y para las galerías participantes, aunque no ha sido el único sostén a lo largo de estos años. Hay que resaltar el importante respaldo del coleccionismo privado, y no sólo internacional, cuya presencia es indispensable para las galerías y para potenciar la proyección del mercado español, sino muy especialmente el coleccionismo nacional, que siempre ha sido fiel a la feria, y que representa uno de sus grandes soportes. Incluso este año, a pesar de las circunstancias actuales, estoy segura de que vamos a contar nuevamente con su apoyo.
No obstante, con respecto a la revisión que plantea, creo que siempre es bueno someter los proyectos a una permanente revisión para adecuarlos a las necesidades y a los nuevos tiempos. Si se quiere una feria de calidad, es imprescindible. De hecho a lo largo de estos últimos cuatro años se han producido algunos cambios en esa dirección, pero siempre marcados por el cumplimiento de su principal rasgo de identidad: la calidad de su oferta. Se ha pasado de 296 galerías en 2006 a 238 en esta edición, lo que representa una distancia de 70 galerías, y una tendencia hacia la concentración de buenos proyectos. Asímismo, en cuanto a la limitación de espacios, también se ha producido una evolución, ya que en el Programa General el mínimo se establece en 65 metros cuadrados, mientras que en Arco40 se reduce hasta los 40 m2, lo que aporta flexibilidad a la hora de optar por tener presencia en la feria.
Por ello, la dirección en la que vaya a transitar ARCOmadrid en los próximos años vendrá marcada por la evolución del mercado y por el objetivo de calidad. En ese camino es en el que se han establecido las bases para fijar un marco de colaboración permanente entre las galerías e IFEMA y trabajar en el diseño de cada edición.
AI: ¿Hay coleccionista privado en España o fuera de ella para la feria ARCOmadrid, según los datos que maneja la organización? ¿Qué actuaciones realiza la feria para atraerlos?
LF: No solo lo hay, si no que me atrevería a afirmar que el mayor peso de la feria lo concentra el coleccionismo privado español, que ha ido creciendo paulatinamente a lo largo de los últimos 28 años, de la mano de la propia feria. Asímismo, hemos consolidado un programa específico dedicado coleccionistas internacionales por el que en cada edición invitamos a más de 300 collectors del mundo entero, al que se suma un programa de invitados especiales que engloba profesionales del arte de especial relieve de muy distintos países, que aportan también un grado importante de dinamismo y un alto nivel profesional.
En este sentido, estamos realizando un gran esfuerzo en cualificar al máximo la selección de los coleccionistas invitados por ARCO, tanto extranjeros como españoles, que van a venir llegados de todo el mundo a comprar en la feria. El objetivo de todas las acciones en este ámbito es conseguir dar un impulso a la actividad de las galerías y promover ventas, acuerdos e intercambios.
También, como he mencionado antes, ha sido muy importante, el alto nivel de coleccionismo institucional, que siempre ha mantenido un fuerte apoyo a esta convocatoria, reflejado no sólo en sus programas de adquisiciones, sino también en los acuerdos institucionales que suponen una gran ayuda para las galerías y para ARCOmadrid.
AI: ¿Cómo y en qué posición se inserta la feria ARCOmadrid en el contexto de las grandes ferias internacionales de arte?
LF: ARCOmadrid es actualmente una de las ferias de arte más destacadas del mundo. Es cierto que hay otras como Art Basel, Art Basel Miami o Frieze de Londres que gozan de gran prestigio, y también de un importante coleccionismo que ha respaldado su posicionamiento, pero el mérito de ARCOmadrid es haber conseguido buscar su sitio y competir con lo que es su baza más importante; su propia esencia y personalidad, y lo que le ha otorgado un rasgo diferencial, como es su eclecticismo, su mirada al arte español, portugués y latino -que sin duda habrá que reforzar este último aunque ARCOmadrid continúa siendo referencia fundamental para los grandes coleccionistas latinoamericanos- y por supuesto su aportación como feria pionera en otorgar un papel destacado a la figura del comisario, con la presencia de programas artísticos paralelos de gran interés, fruto del trabajo de importantes comisarios internacionales.
Todos estos aspectos han definido a ARCO, junto a su consolidación como un lugar destacado de encuentro para los profesionales y expertos internacionales del arte de la mano del Foro, modelo que ha sido posteriormente incorporado por otras ferias del circuito internacional.
AI: ¿Cuáles han sido las razones de que, finalmente, no haya acudido a Madrid, en coincidencia con ARCOmadrid 2010, la feria Design Miami, tal y como se anunció en julio pasado?
LF: Efectivamente se realizó un amplio trabajo para poner en marcha el proyecto de atraer a Madrid la feria Design Miami, que habría aportado un importante plus no sólo a ARCOmadrid sino al conjunto de la oferta cultural de la ciudad. No obstante, las circunstancias del momento económico actual, no han permitido que llegara a consolidarse este proyecto, al menos de cara a esta próxima edición.
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